Encerrados en su propia casa.

Esta noticia expone la realidad de muchas personas mayores que viven en nuestro país. Muchos edificios no están preparados para las condiciones especiales que puede tener cualquier persona, incluidas aquí las personas de la tercera edad.

Existe una gran dificultad para desplazarse fuera del hogar de residencia y ello conlleva a un aislamiento social total, todo esto a consecuencia de la falta de adaptación de determinadas infraestructuras dentro del edificio donde viven, aunque también lo hay en la propia calle.

Es importante el conocimiento de este fenómeno para hacer visible la importancia que tiene que un persona pueda salir a la calle, a pasear, a que le de el aire, a conversar con cualquier otra persona en un parque o en el supermercado. La interacción social es fundamental para el desarrollo de una persona, ya que el contacto interpersonal hace que se de una continuidad de habilidades sociales y conversacionales, además de otras habilidades fundamentales para sentirse una persona activa.

Prisioneras en su propia casa: así es el día a día de personas mayores con discapacidad.